FEDERACION ARGENTINA DE PSICOPEDAGOGOS
Premio Anual: “17 de Septiembre” Edición 2017
Autoras: Lic. Carla Buzzi (MP 006) Lic. Mónica Torrea (MP 004 )
Mails: carlabuzzi@gmail.com monicatorrea@yahoo.com.ar
Provincia: Chubut
Institución: Colegio Profesional de Psicopedagogos de la Provincia del Chubut (Ley X -38)
El informe psicopedagógico, otra oportunidad de aprendizaje
Eje temático: El informe psicopedagógico como oportunidad de intercambio
Palabras clave:
Informe Psicopedagógico – Intercambio psicopedagogo- Escuela -Aprendizaje
“Cuando a las palabras no se las lleva el viento…
El informe psicopedagógico, otra oportunidad de aprendizaje “
A las palabras no se las lleva el viento, dejan huellas Cuiden sus palabras, porque marcan destinos…El propio, el ajeno (Anónimo)
El presente escrito se basa en información que recabamos a través de una encuesta y entrevistas realizadas durante Febrero de 2017 a colegas residentes en la Provincia del Chubut (Patagonia, lugar donde reina el viento) que nos llevó a reflexionar acerca de la importancia de los Informes Psicopedagógicos en las escuelas.
Si bien abunda material acerca de la redacción de informes, resultan escasos los textos que abordan particularmente los Informes Psicopedagógicos de la evaluaciones diagnósticas y los intercambios que generamos a partir del mismo, por lo cual, el interés de esta producción es retroalimentar nuestro propio aprendizaje sobre estas prácticas profesionales.
¿Qué caracteriza a un Informe Psicopedagógico?
El Informe Psicopedagógico es un escrito cuya especificidad se centra en dar a conocer aspectos vinculados al aprendizaje de una persona, considerando sus posibilidades, dificultades y necesidades a fin de orientar tanto las prácticas pedagógicas en las instituciones escolares como los objetivos de la intervención clínica que el profesional realizará para favorecer los procesos de enseñanza y de aprendizaje. Además, como veremos más adelante, para la mayoría de los psicopedagogos su entrega conlleva un valor agregado.
¿Qué información contiene?
Con una extensión promedio de tres carillas en sus informes, los colegas consultados refieren que incluyen diferentes ítems con la siguiente frecuencia:
Ítem | Porcentaje | Ítem | Porcentaje |
Datos personales | 90% | Motivo de consulta | 80% |
Antecedentes familiares, escolares, etc. | 75% | Técnicas administradas | 55% |
Área emocional-relacional | 75% | Área cognitiva | 100% |
Área madurativa | 30% | Competencias (lectoescritura, cálculo) | 85% |
Orientaciones escolares | 80% | Indicaciones terapéuticas | 50% |
Asimismo, coinciden en señalar que, en esta variedad de ítems donde describen diferentes características, suelen destacar los aspectos más preservados de la persona evaluada, ya que es desde allí donde cualquier intervención podrá partir, diseñando dispositivos y estrategias conducentes a que la experiencia del aprender posibilite un mejor desarrollo de las potencialidades.
Cuando el informe se encuentra dirigido a una institución escolar y con el fin de adecuarlo a los destinatarios, en este caso los docentes, los profesionales consultados mencionan que emplean un lenguaje comprensible, priorizan la información que resulta relevante para la tarea de enseñar, aclaran datos psicométricos y ejemplifican el vocabulario disciplinar.
El 78% de los colegas, refiere que entregan los informes de manera personal con una entrevista en la escuela cuya finalidad es explicar y ampliar la información presentada por escrito y co-construir estrategias que faciliten los procesos de enseñanza y aprendizaje. Dicho porcentaje nos resulta significativo, ya que evidencia la importancia en nuestro quehacer de la comunicación con la institución escolar a partir de la entrega del informe diagnóstico.
¿Cuáles son las expectativas en la escuela sobre el informe?
Los profesionales relatan que a veces se espera un diagnóstico. Adherimos a la idea de que las oportunidades o dificultades para aprender no quedan estrictamente definidas por una patología; y apostamos a rescatar la singularidad del estudiante y descubrir cómo se presenta dicho diagnóstico en esa persona en particular, qué significados se le han otorgado, qué limitaciones y qué posibilidades se han construido a su alrededor. Pero además, si el alumno es un niño o un adolescente, creemos que no podemos pensar en definiciones determinantes, ya que se trata de un ser en pleno proceso de constitución. Asimismo, esta postura de evitar posibles etiquetamientos junto a no revelar información confidencial, constituyen aspectos que los colegas mencionan principalmente como consideraciones éticas del informe.
Continuando con las expectativas, otras
veces, las mismas se vinculan con explicitar por qué no aprende un alumno, como
habría que enseñarle. En lugar de
brindar
respuestas puntuales a estas inquietudes, que corren el riesgo de transformarse en recetas rígidas; creemos que brindar una descripción integral de la modalidad de aprendizaje permitirá no sólo comprender como es el funcionamiento cognitivo del alumno, sino también saber cuáles son las actividades que presentarán más obstáculos y por lo tanto requerirán de mayor diversificación.; sino fundamentalmente explicitar las posibilidades que conducirán a potenciar los procesos de aprendizaje.
Informar acerca de cuáles son las fortalezas para aprender de un estudiante, surte un efecto sustancial, ya que lo ubica como sujeto aprendiente, instancia que le devuelve las posibilidades de aprender y convoca al docente a la ineludible tarea de enseñar. Sería interesante que las sugerencias brindadas por el psicopedagogo, sirvan como orientaciones para la construcción de estrategias didácticas favorecedoras de los aprendizajes de un estudiante en particular, y que esta acción se potencie posteriormente. El maestro podrá continuar modificando y enriqueciendo sus propuestas, y transferirlas en beneficio de otros estudiantes. En este sentido, se trata de una intervención que no solo habilita el pensamiento del alumno, sino que también potencia el del docente.
¿Por qué el Informe constituye otra oportunidad para el aprendizaje?
Tal como expusimos, para una
significativa mayoría de los colegas, el Informe no se disocia de la
entrevista. Consideramos que este encuentro entre el psicopedagogo y los
actores institucionales es crucial. Deja de ser un momento de la entrega de un
documento formal y se
constituye en una
oportunidad para aprender
sobre ese alumno
a partir del intercambio de miradas: para la escuela
es la posibilidad de descubrir que no es que ese alumno no aprende sino que
aprende de manera diferente, que no es quien solo tiene dificultades sino
también posibilidades.; para el psicopedagogo es la posibilidad de descubrir
como es el alumno en otro entorno de aprendizaje y como es el docente que
trabaja diariamente con él. El Informe se transforma en el puntapié inicial
para un espacio de dialogo, intercambio y encuentro ya que permite que surjan
otras maneras y posibilidades de enseñar y de aprender, de poder entender,
comprender y construir otros caminos, donde todos sabemos algo y desconocemos algo.
Porque a las palabras no se las lleva el viento, quedan escritas, son dichas y
escuchadas, se enriquecen, construyen, invitan al trabajo conjunto que nos
permite aprender.
Bibliografía
BORSANI, M: (2011) Construir un aula inclusiva. Estrategias e intervenciones. Paidos. Bs. As.
FILIDORO, N: (2008) La relación entre discapacidad y problemas en el aprendizaje no tiene carácter de necesidad. Revista Actualidad Psicológica, Año XXXIII, N° 362: 22-25
UNTOIGLICH, G: (2013) En la Infancia los diagnósticos se escriben con lápiz Noveduc